viernes, 25 de mayo de 2012

Rodrigo Rato (o cómo premiar el fracaso), por Miguel Castro


El principal reto que se le planteaba a Rodrigo Rato cuando accedió a la cartera de economía en el año 96, era trazar las líneas maestras de un plan que concluyese con el cumplimiento por parte de España de los criterios establecidos en el Tratado de Maastricht para acceder a la Union Monetaria del Euro. Dichos criterios se basaban en tres pilares:

1. Reducción del déficit público;
2. Reducción del porcentaje de deuda pública en relación con el Producto Interior Bruto.
3. Rebaja de la inflación.

Dos años y tres meses más tarde de la investidura del Gobierno, los objetivos se habían cumplido y el Consejo Europeo decidió por unanimidad la inclusión de España dentro de los 11 países que inicialmente compondrían la Union Económica y Monetaria.

Este aparente triunfo, dejó tras de sí un reguero de consecuencias negativas para el común de los ciudadanos:

1. Se aumentó notablemente la presión fiscal de las clases medías y bajas: mientras que a la clase alta se le rebajó en un 6%, se congelo el sueldo de los funcionarios.
2. Se redujo el poder adquisitivo en un 4%  único país de la Unión Europea en que descendió—.  
3. El Salario Minimo Interprofesional se situó en tan sólo un 34% del salario medio del país (la recomendación europea era del 60%).
4. Severas políticas de austeridad y recorte de inversión tanto en educación como en sanidad, dos pilares fundamentales del llamado “Estado del bienestar”.

Pero si a medidas controvertidas del Gobierno de Aznar nos referimos, tres se llevan la palma: 

1. Flexibilización del mercado de trabajo,
2. Política de privatizaciones de empresas públicas.
3. Ley del suelo de 1998.

Lo que en su día se conoció eufemísticamente como “flexibilización laboral”,  fue en toda regla una precarización de los trabajadores. Las consecuencias fueron estas:

1. Se redujo la indemnización por despido improcedente.
2. Los empleos temporales se multiplicaron hasta cifras desorbitadas —un 250% más, que la media de la Unión Europea—.
3. Los “empleos basura” ligados fundamentalmente a la construcción y al sector de la hostelería fueron la base de la bajada del paro, y los que primero afectó la crisis actual.

Otra medida impulsada por Rodrigo Rato, fue la venta de empresas públicas como Repsol,  Telefónica, Endesa, Tabacalera, Argentaria, Red Electrica Española y un largo etcétera, esta privatización masiva  fue la base de la reducción del déficit.

En las cúpulas directivas de dichas empresas situaron a gente muy afín al Partido Popular —denominados por el Financial Times, como “Rodrigo Rato's friends” (amigos de Rodrigo Rato)— para seguir influyendo en estos emporios estratégicos, una vez privatizados. Gente como Juan Villalonga (Telefónica) compañero de pupitre durante el Bachillerato, e intimo amigo de Aznar —ahora parece que distanciados—, Rodolfo Martín Villa (Endesa)  procedente del Sindicato Vertical franquista y miembro de la Ejecutiva Nacional del PP,  Miguel Blesa (Repsol) íntimo amigo amigo de Aznar, amistad forjada cuando ambos opositaban a Inspectores de Haciendca, Vicente de La Calle (Tabacalera) amigo personal de Rato etc..

La mayor parte de estos gestores, cuando las empresas completaron el proceso de privatización, multiplicaron sus sueldos y tejieron una amplia madeja de influencias para perpetuarse en el poder. Lo correcto habría sido, que una vez que se hubiese completado el proceso de privatización hubiesen dimitido, dejando a los accionistas elegir libremente un nuevo consejo de administración, al margen de la política.  

La Ley del suelo de 1998 aprobada por el Gobierno popular, introdujo un elemento clave, que es en teoría, la agilización de trámites para que “todo aquel suelo que no sea susceptible de protección natural, ambiental, histórica o paísajística pueda ser urbanizado”,  al corresponder a los Ayuntamientos las competencias urbanísticas de otorgar los permisos de edificación, sin que  haya unos criterios objetivos, claros y trasparentes, esta liberalización del suelo,  fomentó el pago de sobornos, la corrupción  y el aumento de los pelotazos inmobiliarios. En tan sólo 4 años el precio de la vivienda se disparó un 30% y la dependencia del sector constructivo, en la generación de nuevos empleos fue claramente en aumento.

Por lo tanto podemos concluir que la gestión de Rodrigo Rato al frente del Ministero de Economía se salda con unas cifras macroeconómicas notablemente buenas  —empleo, deficit, inflación— , detrás de las que se esconden unos cimientos muy endebles, basados en la generación de un empleo precario y poco poco productivo, además de un empobrecimiento del Estado del bienestar y un aumento de la corrupción y los pelotazos urbanísticos

Tras concluir sus dos legislaturas al frente de la cartera económica, accedió a la Presidencia del Fondo Monetario Internacional, puesto que desempeño entre los años 2004 y 2007. El balance al frente del organismo no puede ser más desalentador, un informe auditor elaborado por el  propio Fondo, en concreto por la Oficina de Evaluación Independiente concluye lo siguiente: “El FMI no pudo anticipar la crisis, su ritmo ni su magnitud, y en consecuencia no pudo advertir a sus miembros”  “se confió excesivamente es la solidez y la resistencia de las grandes instituciones financieras, y en las prácticas llevadas a cabo por los principales centros financieros”, estos errores se debieron a “un elevado grado de pensamiento de grupo, una captura intelectual y un pensamiento generalizado de que una gran crisis financiera en las economías avanzadas era improbable". "Una gobernanza interna débil y una cultura institucional que desalienta visiones contrarias, también jugaron un papel importante”.

Como premio a su “esplendorosa” carrera se le nombró presidente de Caja Madrid, que tras la fusión con otras 6 cajas de ahorros se convirtió en la cuarta entidad bancaria del país, se le asigno un sueldo de 2,34 millones de euros y tras dos años y medio en la presidencia, se vio obligado a dimitir tras conocerse que Bankia tendría que recibir entre 7000 y 10000 millones de euros  de dinero público, para paliar su gran exposición al sector inmobiliario y promotor (ahora se sabe que serán 20.000 millones, y ”lo que haga falta”, que saldrán, otra vez, de nuestros bolsillos). Lo que en su día sustentó su gran “triunfo” político, la especulación inmobiliaria, se convirtió en su tumba como “gurú” de las finanzas.








17 comentarios:

  1. Simplemente, la realidad.

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  2. "Una gobernanza interna débil y una cultura institucional que desalienta visiones contrarias", éste es en realidad el pensamiento único del PP allí donde gobierna o tiene alguna responsabilidad.

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  3. Que el capitalismo es un sistema injusto que provoca diferencias sociales y condena a la pobreza países es una cosa, pero que el PP es una caterva de filofascistas incapacitados y tendentes a la corrupción es otra.

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  4. Muy buen artículo Miguel, se agradecen tus esfuerzos aunque lamentablemente sigo viendo a la mayoría de la gente viviendo en los mundos de "yupi", y eso que la cosa está jodida de verdad.
    Es bueno recordar el pasado más reciente para poder valorar la delicada situación actual.
    Siempre nos tratan de vender los "éxitos" del pasado como una garantía de que los responsables de las instituciones de aquellos momentos pueden hacer cambiar las cosas ahora "para bien". Sin embargo las recetas de aquellos supuestos "éxitos" son las que nos llevan a esta espiral decadente, y aumentar las cantidades de los ingredientes de esas recetas en un momento como el actual sólo va a acelerar las cosas... "para mal". Y lamento pensarlo y decirlo... "pero ya era hora!"

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  5. Que mano tiene el señor Quique para hacer de asuntos un poco difíciles de comprender (aprehender, aprehender) asuntos fáciles de comprensión!!! Y al foto que ilustra, bueno, no se puede mejorar, clavada. Algo así le ha pasado al tipo y a lo que se supone representaba. El caballo al no poder con la carga pues ya se sabe, la gravedad y todo eso...

    UROG de Holguín

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  6. Erré, pero no importa, el artículo por si solo se defiende. Bravo Miguel!

    UROG de Holguín

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  7. Gracias por el comentario David. Coincido contigo, creo que hay que cambiar los "ingredientes", para no repetir cíclicamente los errores que nos han conducido, hasta esta situación tan penosa.

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  8. Muchas gracias Urog, me alegro de que te gustase

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  9. Este articulo solo es una cara de la realidad, también es verdad que se saneo una Seguridad Social en ruinas y el que quería trabajar podía, cosa que ahora es imposible.

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    1. En el artículo he dejado claro que la cifras en materia de empleo eran muy buenas, eso si un empleo precario y poco productivo. También hay que tener en cuenta la buena situación global de la economía tras superar la crisis asiática de comienzos de los 90, con una bajada clara del precio de la energía de las materias primas y unos tipos de interés muy bajos, los fondos estructurales y de cohesión concedidos por la Unión Europea, también influyeron.

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  10. Creo que las consecuencias de que se creara empleo de esa manera quedan bastante bien explicadas en el post. Gracias Anónimo por animarte a dejar tu comentario. Necesitamos más como tu, aunque sea para discrepar.

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  11. Un dato como el descenso del paro no es imperativamente beneficioso tanto a nivel macroeconómico, y por ende "macrosocial".

    La reciente reforma laboral es un claro ejemplo. Una empresa tiene 200 empleados, la mitad de sus empleados rondan los 50 años, cobran entre 35-40 mil brutos al año por antigüedad en la empresa, anteriores convenios, etc... Si a esos 100 los largas con las "rabajas al despido" de la nueva reforma, y contratas a 150 chavales que cobrarán 12 mil al año. Has bajado el paro en 50 personas, correcto. Pero, ¿ha sido beneficioso para la macroeconomía del Estado? No!... ¿A nivel "macrosocial" ha sido beneficioso para los trabajadores? No!... y una larga lista más de aspectos negativos de esa política que no voy citar para no extenderme.

    Sin embargo, la simpleza de decir se ha bajado el paro en 50 personas, ha sido beneficioso. Es tomada como la palabra de Dios, sin pararse a pensar lo más mínimo. Algo muy propio de la fé... Si de verdad están esperando que nos entreguemos a la fé sin plantearnos dudas, sin querer interpretar los datos, sin indignarnos ante esta estafa... van apañados.

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  12. A la fe que nos entregamos es a la de explicaciones meridianas como la tuya, David. Gracias.

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    1. Es verdad, estamos todos muy quemados. Gracias Miguel por la claridad con que explicas la situación, que a mi, personalmente, me ayuda a entender.

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    2. Muchas gracias a ti por leerme.

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  13. Miguel soy Aurora de Murcia,no tengo palabras para este articulo,pero es imposible condensar mas realidad y estafa en menos palabras.excelente!!!!!

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    1. Muchas gracias Aurora me alegro de que lo hayas leído y te haya gustado. Un saludo

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